Reconocimiento. ¿Qué es en realidad? ¿Por qué es tan importante y a la vez tan ausente en las relaciones?.

¿Sabías que el reconocimiento, junto con la escucha, constituye uno de los pilares básicos para establecer y mantener cualquier relación personal y profesional sana y sólida?.

Uno de los bloqueos emocionales más habituales y dolorosos, que solemos trabajar en las sesiones de Coaching Relacional, que impiden a las personas perseguir sus sueños y objetivos, ya sea a nivel laboral como profesional, es el provocado por el hecho de que, en un determinado por el momento, no han obtenido el reconocimiento que necesitaban para algún miembro de su familia o red profesional, y por lo tanto, muy en su interior, no se sienten merecedores del objetivo que quieren alcanzar.

Un «estoy muy orgulloso de ti«, un «has hecho un trabajo excelente«, o simplemente el acto simbólico de que un líder empresarial coloque la mesa del despacho a la vista de sus subordinados o colaboradores, para que éstos sean vistos, son palabras y gestos que hacen milagros a la hora de sanar y de fortalecer las relaciones con los demás.

Dice el prestigioso Coach Joan Quintana:

«Reconocer es, en realidad, declarar y hacer sentir al otro que es válido, visible, merecedor de su existencia. Es hacer saber al otro lo importante que es y que se le tiene en cuenta. Es decirle qué hace bien y también que debe mejorar. Reconocer es también establecer límites. Y no es sólo mirar y ver al otro, es sobre todo decírselo y manifestárselo con actos, gestos explícitos y concretos”.

Somos seres relacionales y el reconocimiento es una necesidad básica que todas las personas tenemos, en cualquier ámbito de nuestra vida. Si esta necesidad no se satisface de alguna manera, enfermamos o rompemos nuestras relaciones”.

Por ejemplo, en las familias, los niños experimentan la tristeza si se sienten «invisibles» por parte de su padre o su madre.

En un sistema, ya sea en una familia, una empresa, una organización, un equipo de trabajo, las personas o los profesionales sienten desmotivación, frustración, tristeza y rabia, si de alguna manera o en un momento determinado no reciben o no han recibido el reconocimiento explícito de sus compañeros y superiores.

¿Qué sucedería si en las empresas, família o relaciones de pareja recibiéramos más reconocimiento? ¿Seríamos más felices, verdad?

Ten en cuenta que:

«No puede haber ninguna relación poderosa, sana, sólida, ni estable si no hay una reconocimiento constante y explícito, en el conjunto del sistema y entre las partes que lo componen».

Así que ya lo sabes. Siempre que con alguien tengas que abordar una negociación, una conversación pendiente para reparar una relación, o para establecer nuevos vínculos, practica la escucha activa y obséquiale con un reconocimiento. Verás lo fuerte y poderoso que se convertirá este vínculo.

¿Y tú? Te invito a reflexionar:

¿Cómo se hace presente el reconocimiento en tus relaciones? ¿Qué reconocimiento de tu padre, tu madre, de tu pareja o de tu jefe te hubiese gustado recibir y no obtuviste? ¿Cómo sueles reconocer a las personas que te rodean?.

Estaré encantado de que compartas conmigo tus impresiones.

Con amor y gratitud,

Pere

2 comentarios

    1. Hola Rosa!

      Gràcies pel teu comentari! Així és. El reconeixement ha d’estar sempre present en les nostres relacions.
      Una abraçada,

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